LA ECONOMIA EUROPEA
Una combinación de alivio y expectación ante el futuro se extendió tras conocerse la noticia del acuerdo alcanzado por los ministros de Finanzas de la eurozona sobre el segundo rescate para Grecia, destinado a evitar la quiebra del país sureuropeo.
El optimismo con el que comenzó la reunión de ministros de Finanzas de la zona euro en Bruselas dio paso a una extendida sensación de escepticismo, por cuanto no se sabía a ciencia cierta cuáles eran los principales obstáculos que impedían la confirmación del acuerdo.
Tras más de 13 horas de discusión, se confirmó que Grecia contará con una ayuda de US$170.000 millones para intentar salir del estancamiento económico en el que se encuentra.
La presión del calendario
La cumbre de Bruselas era de enorme importancia para Grecia y, por extensión, para el conjunto de la llamada Eurozona (los 17 países de la UE que tienen el euro como moneda).
El próximo 20 de marzo vence el plazo para que Grecia abone 14.500 millones de euros de la deuda que tiene contraida (US$19.230 millones).
Antes de eso, el país necesitaba que la troika (formada por la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo) liberara la cantidad de US$170.000 millones que se acordó para este segundo rescate y que finalmente se confirmó en la madrugada del martes.
El primer rescate a Grecia se aprobó en mayo de 2010, pero resultó insuficiente. El segundo rescate, cuya cantidad se discutió en julio de 2011 y se aprobó el 27 de octubre, se vio paralizado por varios obstáculos.
El agravamiento de la crisis, la impopularidad de las medias de ajuste que acompañan el plan y la falta de apoyo de la oposición, llevaron al entonces primer ministro griego, Yorgos Papandreu, a proponer un referéndum sobre su aplicación.
Del otro lado, la presión de sus socios europeos obligó a Papandreu a rectificar: el 9 de noviembre dimitió y dio paso a un gobierno de unidad nacional que asumiría la aplicación del plan de rescate.
Sin embargo, el plan ha permanecido bloqueado hasta ahora en espera de que Grecia cumpliera las condiciones exigidas por los socios del euro, entre ellas un compromiso firmado de los líderes de los partidos que forman el Gobierno.
La deuda pública, el principal escollo
Las condiciones que se le impusieron a Grecia causaron un profundo descontento social en el país así como la quiebra de la propia coalición de gobierno, que ha vivido la dimisión de varios de sus ministros durante todo este proceso.
El principal objetivo impuesto por el Fondo Monetario Internacional es que la deuda se reduzca al 120,5% del PIB para 2020.
Actualmente, Grecia tiene la deuda pública más alta del bloque, debe más de US$464.000 millones y excede por mucho el límite de la eurozona del 60% del PIB.
En 2010, el total de la deuda equivalía al 144,9% del PIB y se calcula que aumentó al 161,7% en 2011. Se prevé que baje al 145,5% en 2012 y al 120,5% para el 2020, de acuerdo con las condiciones del segundo plan de rescate.
Implicaciones para los ciudadanos griegos
Se le pidió a Grecia que aplique un recorte de su presupuesto de US$4.370 millones. Para la economía griega, las condiciones de la troika se traducían en una reducción del 25% del salario mínimo, una reducción de las pensiones del 20% y la liberalización de sectores hasta ahora cerrados.
Asimismo, se pidió al gobierno griego que aboliera los convenios colectivos y que despidiera al menos a 15.000 funcionarios.
Hasta el momento, los sectores más perjudicados por las medidas de ajuste han sido la salud y la educación.
Grecia debe además hacer concesiones de su soberanía fiscal, dada la escasa confianza que existe por parte de los socios europeos. Se pidió que el dinero del plan de rescate se ingrese en una cuenta bloqueada para que Grecia no lo invierta o lo gaste en ningún otro concepto.
Cifras preocupantes
Grecia se convirtió en mayo de 2010 en el primer país de la eurozona rescatado por la UE y el FMI. Fue el 12º país en unirse a la eurozona y lo hizo el 1 de enero de 2001.
En 2010, el déficit público anual era del 10,6%. Las autoridades griegas hablan del 9,6% del PIB en 2011. La última previsión de la Comisión Europea es que el déficit se reduzca al 7% en 2012 sin contabilizar las medidas que hay que adoptar para la reducción de la deuda.La economía griega se contrajo un 4,5% en 2010 y se calcula que decreció el 5,5% en 2011, aunque algunas autoridades cifraron la contracción en un 7% en el último cuarto de 2011 en comparación con los resultados del año anterior. Si este dato se confirma, se puede hablar de un decrecimiento del 6,8% para 2011.
BBC Mundo
"Crisis griega"
Las previsiones de futuro son que haya una disminución del 2,8% en 2012 para volver a un crecimiento del 0,7% en 2013.La economía griega supone menos del 3% del total de la economía de la eurozona. El país ha estado en recesión económica desde 2008. La UE calcula que la economia se habra contraido un 15% desde el comienzo de la crisis de la deuda.Según los datos oficiales, el número de desempleados giregos, en una población de 11 millones de personas, es de 1,02 millones, una tasa récord del 20,9%.
'Impensable' salir de la Eurozona
Todo este panorama generó una serie de debates en los que algunos expertos empezaron a hablar de la posiblidad de que Grecia abandonara el euro para volver a adoptar el dracma como moneda.
Sin embargo, y a pesar de la firmeza con la que se ha dirigido todo este tiempo hacia las autoridades griegas, la canciller alemana Angela Merkel fue contundente al decir que esa posibilidad era impensable.
Los analistas consideran que, si bien el peso de la economía griega en la Unión Europea no es significativo, su salida del euro podría significar el comienzo del fin de la moneda única.
El acuerdo de este martes traerá cierta tranquilidad a los mercados financieros. ¿Cuál será el efecto en las calles griegas?
0 comentarios