El presidente Alan García y el primer ministro japonés Naoto Kan concluyeron el domingo en Yokohama las negociaciones para un Tratado de Libre Comercio (TLC) bilateral con el cual Perú espera generar "muchos empleos" y acceder a la tecnología de la potencia asiática.

"Discutimos el Acuerdo de Asociación Económica y declaramos la conclusión exitosa de las negociaciones", señalaron ambos mandatarios en un comunicado dado a conocer tras una reunión al margen de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) celebrada en la ciudad portuaria al sur de Tokio.

El acuerdo incluye, entre otros, capítulos de comercio de bienes, servicios transfronterizos, reglas de origen, procedimientos aduaneros, medidas sanitarias y fitosanitarias, regulaciones técnicas y derechos de propiedad intelectual.

El 99% del comercio bilateral quedará exento de aranceles aduaneros en un plazo de 10 años, según un responsable japonés.

El presidente García se declaró "muy satisfecho" tras el acto de conclusión de las negociaciones y destacó la "inmensa importancia de una economía que produce 5 trillones de dólares por año, es decir 30 ó 40 veces lo que produce el Perú".

"Esta economía con inmenso poder de compra está al alcance de todos los productores que pueden generar muchos empleos dentro del país", señaló en declaraciones a la prensa.

"Japón es al mismo tiempo una potencia tecnológica, y esto permitirá un ingreso más fácil de su tecnología", agregó el presidente peruano.

García partió de Japón con destino a Corea del Sur, donde cerrará también las negociaciones de un acuerdo similar con el presidente Lee Myung-Bak.

"Mañana voy a tener la satisfacción de suscribir con el presidente Lee Myung-Bak un Tratado de Libre Comercio con Corea, que es una importante potencia asiática, con sus capacidades petroquímicas, siderúrgicas", afirmó.

Para Japón, el acuerdo "permite competir en igualdad de condiciones con Corea del Sur", afirmó el responsable japonés.

Al margen de su participación en la APEC y las reuniones bilaterales, el presidente peruano aprovechó su paso por Yokohama para hacer una ofrenda floral en el monumento a los primeros emigrantes japoneses que partieron a Perú, en un parque cerca del lugar donde se celebró al cumbre.